opinión de miércoles

lo bueno de un feriado es ver a los padres con sus hijos paseando en bicicleta por el parque o llevándolos de la mano a la décima jornada de la feria del libro que se instaló en la esquina de Vicuña y Curicó; lo bueno es ver menos autos en las calles o verlos pero sin bocinazos ni manos gesticulando garabatos por la ventanilla con cualquiera de sus dedos; lo bueno es esa sensación del tiempo que corre más lento, es alargar la cerveza en el local de la plaza esperando entrar al teatro, es saber que otros fueron a caminar al cerro, es cortar la semana en dos, es dormir hasta más tarde.

lo malo de un feriado es que aún haya gente diciendo que es una pérdida económica para el país.

andáte a cagar, boludo. y también a la mierda, hueón.